La NASA quiere acercarse lo máximo posible al Sol. Y lo hará en 2018 en una misión a la que se ha bautizado como SPP (Solar Probe Plus).
Esta misión no tripulada se acercará al astro como nunca antes se ha hecho antes, cayendo directamente en la atmósfera Solar.
Según la BBC: “el objetivo es intentar obtener información directa y por primera vez sobre la atmósfera exterior del astro que se encuentra a temperaturas superiores a los 1.400 grados centígrados. Concretamente, la SPP estará equipada con un artefacto como un escudo térmico, un detector de partículas de viento solar y una cámara 3D que captará imágenes en una zona a la que ninguna sonda ha llegado”
Según los expertos, esta misión podría responder a los interrogantes de la Física solar y a cuestiones como, ¿por qué la atmósfera externa del Sol es mucho más caliente que la superficie visible?
En opinión de la NASA, este proyecto es “extraordinario e histórico”, y en él se llevarán a cabo medidas de ciertas partículas del Sol, como son protones y electrones, y medidas de campos magnéticos.
“Este proyecto permite al hombre ir allí donde no ha llegado antes ningún artefacto espacial”, explica Lika Guhathakurta, una de las responsables del programa solar. “Por primera vez vamos a tocar y sentir nuestro Sol”.